El 30 de septiembre es el momento de reflexionar sobre la historia de los internados para niños aborígenes.

Este Día Nacional de la Verdad y la Reconciliación está dedicado a la memoria, el respeto y la resiliencia.

Recordemos que cada niño cuenta y que el camino hacia la reconciliación requiere comprensión y apoyo.

Juntos, avancemos con compasión y compromiso hacia un futuro en el que la verdad y la reconciliación tengan su lugar.